La vejiga es un órgano hueco que se encuentra en la parte inferior del abdomen. Su función principal es almacenar la orina.
La cistitis intersecal es una afección inflamatoria de la vejiga que se encuentra entre la vejiga y el útero. Puede causar dolor pélvico, necesidad de orinar con frecuencia y urgencia urinaria.
¿Qué es la cistitis intersticial?
La cistitis intersecal se produce cuando la vejiga se irrita y se inflama. La causa de la cistitis intersecal no se conoce con certeza, pero se cree que puede estar relacionada con:
- Factores hormonales: Las mujeres son más propensas a desarrollar cistitis intersecal que los hombres.
- Traumatismos: Los traumatismos en la pelvis, como un parto vaginal o una cirugía pélvica, pueden aumentar el riesgo de desarrollar cistitis intersecal.
- Enfermedades subyacentes: Algunas enfermedades, como la endometriosis y la enfermedad de Crohn, pueden aumentar el riesgo de desarrollar cistitis intersecal.
¿Cuáles son los síntomas de la cistitis intersticial?
Los síntomas de la cistitis intersecal pueden variar de una persona a otra. Los síntomas comunes incluyen:
- Dolor pélvico
- Necesidad de orinar con frecuencia
- Urgencia urinaria
- Dolor al orinar
- Sangre en la orina
¿Cómo se diagnostica la cistitis intersticial?
El diagnóstico de la cistitis intersecal se realiza mediante una serie de pruebas, que pueden incluir:
- Examen físico
- Análisis de orina
- Cistoscopia: Es un procedimiento que se utiliza para examinar el interior de la vejiga con una cámara.
¿Cómo se trata la cistitis intersticial?
El tratamiento para la cistitis intersecal depende de la gravedad de los síntomas. Las opciones de tratamiento incluyen:
- Medicamentos: Los medicamentos pueden ayudar a aliviar el dolor y la inflamación.
- Terapia: La terapia física pélvica puede ayudar a fortalecer los músculos del suelo pélvico.
- Cirugía: La cirugía puede ser necesaria en casos severos.
Llame a su médico si cree que puede tener cistitis intersecal.
Si cree que puede tener cistitis intersticial, llame a su médico para programar una cita. Su médico puede diagnosticar la afección y recomendar el tratamiento adecuado.
